David Monreal, los consensos y la racionalidad política


Por Manuel Ibarra Santos

El interesante libro Zacatecas, Una Esperanza, autoría de David Monreal, precandidato de MORENA al gobierno del Estado, contiene en su estructura (de tres capítulos y 275 páginas), no sólo una agenda de propuestas programáticas de acción estratégica, sino la definición, también, de una racionalidad inédita en un político que se arriesga anticipadamente a establecer compromisos éticos y morales, de cara y frente a una sociedad maltrecha y sacudida permanentemente por la pandemia y por los rezagos ancestrales, que sólo han acumulado en la historia de este pueblo, desigualdad, pobreza y miseria.

Dicha obra es abundante en datos e indicadores historiográficos, pero particularmente me detuve en el análisis de fondo y en la reflexión de las definiciones formuladas en relación a los modelos socio/económicos y filosóficos que se plantean en el texto, abierta y/o tácitamente. Y ahí me encontré una implícita concepción, rica en categorías conceptuales, sobre racionalidad política.

En este libro, David Monreal propone la definición de una sólida racionalidad política, soportada por tres pilares conceptuales: 1.- Una rigurosa actitud crítica ante los niveles de subdesarrollo que padece la entidad; 2.- La importancia de la solidaridad y cooperación social para salir adelante; y 3.- La relevancia de promover el diálogo y la comunicación racional para la construcción de acuerdos.
Postula de esta manera, una racionalidad política dialógica –no autoritaria-, fundada en la solidaridad y en la comunicación que fortalezca éticamente los consensos.

En los tres capítulos que integran el contenido de este importante texto se analiza la acción mediadora de los procesos de innovación, como palanca fundamental del crecimiento económico y el bienestar social.

Se presenta un análisis comparativo de cómo se encuentra ésta en los niveles nacional y local. Y particularmente, la innovación, registra en Zacatecas indicadores marginales de avance, ocupando los últimos lugares en el país.

Joseph Schumpeter es el prestigiado economista que socializó el concepto en 1935 y enfatizó que es la educación de calidad el motor de la innovación, la que se manifiesta a través de tres dimensiones: 1.- La invención de nuevos bienes, productos y servicios; 2.- La creación de renovados métodos de producción; y 3.- La construcción de un emergente mercado de intercambio de productos.

En nuestro estado urge y se necesita cimentar un nuevo sistema educativo de calidad, para detonar los procesos de innovación, inexistentes hoy, en los diversos campos de la producción económica zacatecana. David Monreal establece en su libro, una racional crítica sobre este particular y se compromete a promover las bases de la economía del conocimiento en el Estado.

La propia obra de David Monreal pone en contexto, a manera de meta/narrativa, los dos grandes modelos del desarrollo económico. El ortodoxo y el heterodoxo. El primero fundado en la acumulación de la renta y los bienes materiales, promovido por Adam Smith, David Ricardo y Carlos Marx. Este paradigma está superado en la visión de la historia.

El segundo es el modelo del desarrollo humano, propuesto por el hindú Amartya Sen y el paquistaní Mahbud Ul Hak, quienes ponen énfasis no en la acumulación de bienes materiales, sino en los procesos, en la creación de espacios de libertad, dignidad y felicidad, forjados a través de la educación, la ciencia y el arte. Éste es el modelo de corte humanista que conviene a nuestra sociedad.

El libro de David Monreal también presenta una revisión contrastante, con indicadores matematizados, de los escenarios global, nacional y local. Pero particularmente coincido y comparto su idea de racionalidad política dialógica, basada en la construcción de consensos, que me conduce a la recuperación de ideas de pensadores extraordinarios del siglo XX, como Karl R. Popper, Karl Otto Apel y Jürgen Habermas.

La estructura del libro  

El libro Zacatecas, Una Esperanza, contiene una estructura de tres capítulos.

En el primero, se presenta un diagnóstico, con datos objetivos, sobre la situación que guarda nuestro Estado, comparativamente con los escenarios nacional y mundial; en el segundo, se formulan estrategias en materia de innovación económica; y en el capítulo tres se plantean una serie de propuestas estratégicas para promover y detonar el desarrollo económico de la entidad.
 
Los gobernadores ilustrados  

En la historia contemporánea, de 1944 a la fecha, Zacatecas ha tenido gobernantes que destacan por su elevado nivel de ilustración. José Minero Roque, el político/filósofo egresado de la UNAM, elaboró su tesis de abogado en castellano y en latín. Años después, uno de sus aventajados alumnos, José Guadalupe Cervantes, siendo gobernador mostró sus hábitos adictivos por la lectura y devoraba grandes cantidades de libros.

Genaro Borrego ha sido un lector consumado. Ricardo Monreal no sólo mantiene su apego a la racionalidad académica, sino que tiene una vasta producción de más de 30 libros.

Qué importante que David Monreal tenga el hábito de la producción de ideas y de libros. Es esa una fortaleza adicional. Con D21 no hay reversa y, al contrario, se fortalece cada vez más su presencia política

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